No soy una persona muy conocida y tampoco hago esfuerzos por darme a conocer, ni encuentro particular aliciente por promoverme en las llamadas redes sociales.
No puedo permitirme invertir dinero maquetando o revisando el libro con un editor profesional.
Tampoco conozco a personas vinculadas al mundo editorial.
Dispongo de pequeños espacios de tiempo para poder escribir, o bien de madrugada o adentrada ya la noche y no siempre me quedan ganas tras la actividad diaria.
Estoy solo y sin apoyo de ningún tipo en esta tarea.
Me suelo distraer con facilidad ante otras ocupaciones relacionadas con las nuevas tecnologías, programas, reparaciones de ordenadores, trabajos informáticos por encargo…
No pongo interés en participar en diferentes concursos literarios ni en volver a intentar acercarme a las editoriales.
No suelo disponer de muchos alicientes que me lleven a sacar mayor rendimiento literario.
En esta labor no tengo a quien rendirle cuentas, ni obtengo beneficio, ni tampoco resulta mi medio de vida, es por ello que me falta cierto empuje.
También soy bastante tímido e introvertido, situación que aunque a veces haya conseguido disimular o vencer, sigue limitando bastante mi trato con los demás.
Aunque resulto una persona que si me conocen soy asequible, sencilla, alguien capaz de darlo todo por los amigos, la primera impresión que causo es de persona sumamente seria e inaccesible.
Soy apasionado en lo que hago y en temas que domino, mis pensamientos, la gente y los nervios me aceleran, provocando que hable demasiado deprisa, cosa que tampoco me favorece ante mis dificultades para pronunciar la “r”.
Tengo un carácter temperamental que, junto con los nervios, a veces no dan la mejor imagen de mí.
No soy una persona que destaque por su valentía, ni carácter arriesgado o emprendedor. Prefiero ir a lo seguro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario